Se acerca el cambio de hora: los países que no lo hacen

Aunque a muchas personas les suele sentar bastante mal, un nuevo cambio de hora se asoma en el calendario, concretamente para la madrugada del 29 al 30 de marzo. Un nuevo domingo en el que nos despertaremos con la obligación de cambiar todos los relojes de casa.

Al margen del consabido argumento del ahorro de energía, lo que es cierto es que en muchos países no tienen esos dos fines de semana al año en los que no dejamos de preguntarnos si esta vez toca adelantar o retrasar la hora. O, mejor dicho, si dormiremos una hora o una hora menos. Esta vez, por cierto, salen perdiendo los amantes de dormir mucho, porque a las dos de la madrugada serán las tres y, por lo tanto, se trata del cambio de hora en el que se duerme una hora menos.

Islandia… y muchos más

Entre esa lista de países que no cambian de hora precisamente hay algunos europeos, como Islandia, que puede sorprender debido al gran cambio de luz solar que hay entre el verano y el invierno del país nórdico. Pero no, en aquella isla a unos tres mil kilómetros de España no cambiarán los relojes a finales de mes.

Rusia es otro ejemplo. En este caso es desde 2014 que adoptó el horario de invierno para todo el año y ya no cambian la hora. Una situación parecida a la vivida en Bielorrusia que, después de años haciendo como hacemos en España, ya ha adoptado un solo horario para los 365 días del año.

Fuera de la Unión Europea, otros países que no cambian la hora son Nueva Zelanda, una zona de Australia, la mayoría de China, Japón y Estados Unidos, además de buena parte de los países de Centroamérica y Sudámerica, a excepción de Chile, Paraguay y parte de Brasil. En el caso del continente africano, todas las naciones se despertarán el próximo 30 de marzo sin cambio horario alguno excepto Egipto.

Aunque en España hace tiempo que se debate sobre si dejar de cambiar la hora, todavía no ha llegado ese acuerdo, al contrario que otros países donde sí han establecido un solo horario, como Rusia o Bielorrusia. También es el caso de Turquía, que desde 2016 mantiene un solo horario, aunque el gobierno de Ankara optó por quedarse con el horario de verano.