Porqué la gente cree que sabe más que los demás: efecto Dunning-Kruger
¿Tienes la sensación de que te expresas mejor que la media? ¿crees que cocinas
mejor que cualquiera de tus amigos? ¿sabes más de medicina que tu médico de
cabecera? ¿Te parece que conduces mejor que cualquiera con quien hayas
montado en un coche?... Es posible que estés bajo el influjo del efecto dunning
kruger.
El escritor José Cadalso escribió en el año 1772 una obra titulada “los eruditos a la
violeta o Curso completo de todas las ciencias, dividido en siete lecciones, para
los siete días de la semana, publicado en obsequio de los que pretenden saber
mucho estudiando poco”.
Esta obra es una sátira a todos aquellos “sabios” de la época que daban la imagen
de saber mucho pero que en realidad tenían poco conocimiento de todo. En ella
se critica a aquellas personas aparentemente cultas y sabias pero que en el fondo
cuentan con escaso conocimiento de todo lo que comentan y hablan.
José Cadalso puso de manifiesto en esta obra que hay personas que asumen que
saben más de lo que realmente saben y que no saben que no saben.
Hoy en día la ciencia nos explica porque todos tenemos tendencia a ser eruditos a
la violeta en algún campo, y es que todos podemos ser víctimas del efecto
Dunning-Kruger.
Este efecto es la tendencia que tenemos a sobrevalorar nuestras capacidades y
aptitudes. Es un sesgo que nos lleva a asumir que somos más capaces o que
sabemos más de lo que realmente somos o sabemos.
Los estudios de Dunning-Kruger.
Justin Kruger y David Dunning son los dos investigadores de la universidad de
Cornell que dan nombre a este efecto y que desarrollaron una serie de estudios
para verificar porqué la ignorancia genera más confianza que el conocimiento.
Para ello, estudiaron la competencia real y percibida de un grupo de estudiantes
en áreas como la gramática, el razonamiento lógico y el humor.
En la primera parte del estudio se preguntó a los estudiantes que grado de
competencia se otorgarían en cada una de estas aptitudes y luego se les paso una
prueba para ver el grado real de competencia.
Al analizar los resultados obtenidos, Kruger y dunning se dieron cuenta de que
cuanto mayor era la incompetencia del sujeto menos consciente era de ella y más
positivamente sesgada era su valoración. Por contra los sujetos que presentaban
mayor competencia real tendían a infravalorar su capacidad y a subestimar su
propia competencia.
Otras conclusiones que arrojó su estudio y que publicaron en la revista “Journal of
personality and social psychology” fueron:
Las personas menos competentes son las que tienen más dificultades para poder
reconocer su propia incompetencia.
Las personas más incompetentes tienen mayores dificultades para reconocer la
competencia en los demás.
Las personas incompetentes presentan incapacidad para tomar consciencia de
hasta que punto son incompetentes en un ámbito.
Las personas incompetentes si son entrenadas, pueden reconocer y aceptar su
incompetencia.
¿Porqué la gente cree que sabe más de lo que sabe?
Una de las explicaciones que encontramos a este efecto es que no podemos
darnos cuenta de nuestra incompetencia sin tener un conocimiento mínimo de
dicha competencia. Por ejemplo, no puedo saber si tengo buen nivel de inglés
escrito a no ser que sepa cuales son las reglas gramaticales que rigen el idioma.
Por otro lado, el no saber de algo no quiere decir que nuestra mente no haya
desarrollado una idea prejuiciosa sobre ese algo en base a ideas preconcebidas,
conocimientos extrapolados de otros campos y “sabidurías populares”, haciendo
gala de ese refrán que dice que “de fútbol y de medicina todo el mundo opina”.
Podríamos entender este efecto como una medida de autoprotección, quizás si
desde el primer momento en que empezamos a interesarnos por algún tema o
estuviéramos desarrollando alguna competencia llegaramos a la conclusión
socrática de que “solo se que no se nada”, es posible que nos diera un vértigo tal,
que nos llevara a abandonar la tarea y el aprendizaje en ese mismo momento.
¿Comó evitar el efecto Dunning-Kruger?
Primero ser consciente de que este efecto existe y que todos podemos caer en él,
ya que todos somos incompetentes en diferentes áreas. Esto en el fondo lo que
nos permite es empezar a escuchar a los demás. A asumir una perspectiva en la
que nosotros podemos estar equivocados al igual que lo pueden estar los demás.
Pedir opinión a los demás. Si son expertos en algún tema, su conocimiento te
ayudará a generar nuevo conocimiento y por tanto a ser más consciente de lo que
te queda por aprender.
Seguir formándonos en diferentes áreas, sólo sabiendo cada vez más somos
capaces de ver nuestra verdadera capacidad y conocimiento. Cuanto más
sabemos, más ajustada es nuestra valoración al nivel real de conocimientos que
poseemos.
Otros efectos relacionados con Dunning-Kruger
No solo son presa del efecto Dinning-kruger las personas más incompetentes, sino
que las personas competentes moderadas y los expertos también se ven influidos
por otros efectos:
Las personas con conocimientos moderados sobre tema o con habilidad media
para desarrollar una función, a menudo presentan inseguridades, porque ya son
conscientes de una manera realista de lo que saben y de lo que no saben, es
decir, saben lo que les queda por aprender para considerarse realmente expertos
en algo. Estas inseguridades hacen que se tenga menos confianza en la propia
capacidad. Esta sensación de poca confianza puede llegar al extremo de
convertirse en el síndrome del impostor.
En relación a las personas que son expertas, se da un efecto de sobrevaloración
de los conocimientos de los demás. A diferencia de los expertos moderados, Los
expertos no infravaloran lo que saben, éstos saben exactamente el valor de sus
conocimientos, su sesgo reside en considerar que los demás saben más de lo que
realmente saben. Por eso cuando hablamos con un experto sobre el tema que
domina parece que da por hecho que sabemos cosas que en realidad no
sabemos. De alguna manera consideran determinados conocimientos como
obviedades y por tanto asumen que son conocimientos que todos tenemos. El
resultado de esté sesgo es que al experto se le quitan las ganas de seguir
enseñando porque no le entienden del todo, y al que aprende las ganas de seguir
aprendiendo porque se ve incapaz de seguir el ritmo..
Como ves el efecto dunning-kruger nos explica la tendencia que todos tenemos a
creer que sabemos más de lo que sabemos y es esta incompetencia la que nos
dificulta poder reconocer nuestros errores y limitaciones.
Más abajo encontraras un video de TEDed en el que podrás encontrar una
animación sobre el efecto kruger-dunning. (Puedes cambiar el idioma de los
subtitulos en el botón de configuración que te aprece en la parte inferir derecha del
video)