Formas de Gobierno
Formas de Gobierno
Dentro del protestantismo este modelo modifica al católico romano, en el sentido de que
elimina al papa pero permanece un episcopado jerárquico que ejerce la autoridad. Proviene
del griego epis/scopos que significa “vigilante, sobreveedor u obispo”. Consiste en el
derecho del obispo de consagrar y ordenar a otros obispos, sacerdotes y diáconos. Esto
implica la sucesión de obispos y el dominio del obispo sobre los otros ministros
subordinados, además de la autoridad sobre los laicos. El obispo gobierna sobre la iglesia.
Así enseñan la Iglesia Católica, la Iglesia Ortodoxa, la Iglesia Anglicana y la Iglesia
Episcopal. Otros grupos que abogan por esta forma de gobierno pero sin otorgar validez a la
sucesión apostólica de los obispos son los metodistas y las Asambleas de Dios.
concilio.
No se instruye sobre la sucesión apostólica en el NT. Es más, cuando el Señor comisionó
a sus apóstoles no incluyó instrucción alguna sobre la sucesión apostólica (Mr. 3:14-19).
En la Iglesia primitiva esta práctica apareció recién hasta el siglo II. El NT no dice que
sea necesario el ordenamiento para ser ministros. Los ancianos u obispos sucedieron a
los apóstoles pero no tomaron su puesto sino sólo su oficio. Su posición fue siempre
diferente a la de éstos.
Ventajas Desventajas
Tienen una buena organización, que les El poder reside principalmente en el clero.
permite estar en contacto con todas sus Debido a la estructura jerárquica tan
iglesias locales. compleja se tiende a la burocracia.
Hay elección y cambio de obispos Los miembros laicos de la iglesia, en la
anualmente. práctica no tienen mayor poder de
Todos los obispos son iguales y decisión.
comparten el liderato en la iglesia.
Este sistema comenzó con Calvino en Ginebra. Él afirmaba que la iglesia tiene cuatro
oficios: pastores, ancianos, maestros, diáconos. Fundamentó su estilo representativo del
presbiterianismo en Ro. 12:8; 1 Co. 12:28 y 1 Ti. 5:17. De esta manera, promovía paridad de
ministerios, autonomía de las iglesias locales, pero hubo control político del gobierno
también. Sobre todo, los lineamientos sinodales de los oficiales más altos se hacían por esta
vía. Las modernas iglesias presbiterianas, reformadas y otras de tradición calvinista siguen
este sistema, aunque no sean iglesias estatales.
El sistema consiste en que la iglesia es regida por presbíteros, ancianos, que representan el
gobierno de la iglesia. La iglesia local es gobernada por su cuerpo de ancianos o presbiterio.
El grupo de presbíteros forma el Sínodo. Este representa un área geográfica más extensa e
incluye a los presbiterios. El Sínodo sirve como tribunal de apelaciones en asuntos
eclesiásticos. A su vez, el grupo de sínodos forma el distrito. Los varios distritos forman la
asamblea general. Esta es la autoridad suprema de la iglesia y es responsable de la misión de
la denominación.
como oficial que preside. Los ancianos son elegidos por el consistorio y la congregación
gobierna no directamente sino a través de sus ancianos.
El NT presenta que los ancianos fueron nombrados por los apóstoles (Hch. 14:23; Tito
1:5). Los apóstoles y los ancianos eran encargados de la Iglesia según el concilio de
Jerusalén (Hch. 15:4; 22-23). Había distinción de ministerio entre los ancianos (1 Ti.
3:4-5). Los pasajes que hablan de la ordenación de ministros implican el sistema federal.
Los defensores del sistema presbiteriano remarcan su orden, tolerancia a una limitada
autonomía de la iglesia local, fortaleza confesional y la insistencia en mantener
requisitos muy elevados para sus ministros. Estos son escogidos por la congregación y
están bajo la disciplina de ella, igual que todos los miembros. La ordenación faculta al
clero a dedicar tiempo completo a los ministerios que el laico entrenado sólo puede
desempeñar usando una parte de su tiempo.
1
Louis Berkhof, Teología Sistemática: 705.
Formas de gobierno de la “iglesia” 4
Ventajas Desventajas
3. La forma Congregacional
3.1. El concepto:
El sistema congregacional se basa en la independencia y autonomía de la iglesia local. Todos
los miembros de la iglesia, por ser creyentes, se ven como “sacerdotes de Dios”. El gobierno
congregacional representa la forma más temprana de orden eclesiástico. Los
congregacionales afirman que Cristo es su única cabeza y es él quien gobierna a través del
Espíritu Santo, inspirando las decisiones del pueblo congregado. Algunos ven aquí una
forma democrática de gobierno.
Existen dos tipos de gobierno congregacional. Uno que podríamos llamar congregacional
completo y otro parcial. El completo estaba representado en la Reforma por los anabautistas,
quienes practicaban un sistema autónomo de gobierno de las iglesias locales. En este sistema
congregacional completo, la iglesia local decide todos sus asuntos por aprobación de sus
miembros.
Por su lado, el congregacionalista parcial fue desarrollado en la Iglesia Luterana de
Alemania. Hay paridad de ministerios y cierta autonomía de las iglesias locales, pero hay
control político del gobierno sobre todo en lo que se refiere a ministros y superintendentes.
Esta forma es la que funciona en las iglesias luteranas de los Estados Unidos donde no hay
control estatal.
En término generales, con todo, diríamos que en las iglesias congregacionalistas la autoridad
de la iglesia está en cada iglesia local como una unidad autónoma sin ninguna organización
arriba de ella aparte de Cristo, la cabeza. La autoridad es encomendada a sus miembros.
Ellos eligen a sus ministros y a los ancianos. La autoridad de este liderazgo descansa en su
relación con la congregación. Los oficiales no tienen más autoridad que cualquier otro
miembro. Los ancianos son supervisores generales; los diáconos llevan el ministerio con
servicio; el pastor tiene el ministerio de la Palabra. Casi todos los asuntos que afectan a la
vida de la congregación se deciden por votación.
17; 1 Co. 5:5; 2 Tes. 3:6, 14-15; 2 Co. 2:6-7). Parece haber elección en el nombramiento
de los líderes (Hch. 6). La responsabilidad por la doctrina sana y su práctica en la iglesia
recae sobre la iglesia entera (1 Jn. 4:1; 1 Tes. 5:21; 1 Co. 11:23).
3
La Iglesia Comunitaria de Willow Creek, la más grande de América del Norte, es una iglesia. La Iglesia Elim
de San Salvador, la más grande en América Central, es una iglesia celular. La iglesia Bíblica Vida Más Profunda de
Nigeria, la más grande del continente africano, es una iglesia celular. La Iglesia del Evangelio Completo, en Corea del
Sur, la más grande de Asía y del mundo entero, es una iglesia celular (en 1994, esta iglesia rebasó los 750,000
miembros con más de 25,000 células. Karen Hurston, Crecimiento de la iglesia más grande del mundo (1996): 204).
Diecinueve de las veinte iglesias más grandes del mundo son iglesias celulares.
4
Hoy en día, la estructura celular más completa se compone de tres elementos: célula, congregación, y
celebración, aunque muchos dan énfasis prioritario a la primera y a la tercera, es decir, a las células y a la
celebración. Una congregación es un grupo de entre 100 y 250 personas que, además de ser parte de alguna célula,
se agrupa con el fin de establecer lazos fraternos más abiertos, menos íntimos y más misionales. En las iglesias
celulares puras, las congregaciones se componen de la agrupación de no más de veinticinco células para reuniones
especiales o actividades conjuntas. En ambos casos, las congregaciones siempre tienen un pastor que las supervisa y
coordina guardando las líneas de comunicación, autoridad y responsabilidad a través de la jerarquía celular. La
reunión de celebración se lleva a cabo de manera semanal. Sin embargo, cuando la iglesia llega a crecer demasiado,
es imposible que todos sus miembros se reúnan a la vez. Algunas iglesias con estas características hacen
preparativos para reunirse esporádicamente en estadios, coliseos y otros ambientes multitudinarios para albergar a su
gente cuando menos una o dos veces al año.
Para considerar todos los detalles en cuanto a teología, significado y práctica de las células, celebración y
congregación, así como de todo el sistema celular, vea las obras de C. Peter Wagner, Su iglesia puede crecer (1980):
120-35; Juan Carlos Miranda, Manual de iglecrecimiento (1985): 62-63; David Yonggi Cho, Secretos del
crecimiento de la iglesia (2000): 171-86; Dale E. Galloway, Visión 20/20 (1996): 129-87, Carl F. George, Prepare
Your Church for the Future (1992); David Yonggi Cho, Los grupos familiares y el crecimiento de la iglesia (1981);
Joel Comiskey, La explosión de los grupos celulares en los hogares (2000); Larry Stockstill, La iglesia celular
(2000); pero sobre todo, la obra de Ralph Neighbour Jr., Where Do We Go From Here, 2ª edición (2000).
5
Frank Damazio, Effective Keys to Successful Leadership (1993): 6. Este tipo de liderazgo es llamado
teocrático por tres razones: (1) porque depende del llamamiento divino personal con el propósito de que un siervo
dirija al pueblo de Dios; (2) porque una de las funciones explícitas del líder que lo desempeña es la de buscar
Formas de gobierno de la “iglesia” 7
1.1.2. En las iglesias apostólicas: Este tipo de gobierno teocrático parece ser seguido
por las iglesias adheridas al movimiento de la Nueva Reforma Apostólica,6 donde el líder o
pastor principal es considerado el apóstol de dicha organización. A este modelo se une la
implementación de las redes apostólicas compuestas por iglesias locales (congregaciones)
que, por una razón u otra, voluntariamente deciden afiliarse con la red. En este caso, los
pastores de las iglesias locales se relacionan personalmente al apóstol, quedando bajo su
supervisión.7
continuamente la dirección específica de parte de Dios para su congregación; (3) la persona que desempeña este tipo
de liderazgo, mientras vela por que todos rindan cuentas a un superior, mientras él mismo da cuentas a su equipo de
lideres colegas, en cierto sentido, él por estar al principio de la línea de autoridad, rinde cuentas directamente a Dios.
6
Se emplea aquí este título siguiendo el concepto trasmitido por Peter Wagner en Terremoto en la Iglesia:
34-55. Sin embargo, otros autores han adjudicado otros títulos a este movimiento: “los neocarismáticos”, “la nueva
ola”, “neopentecostales”, “iglesias posdenominacionales”, “iglesias neodenominacionales”, “iglesias del nuevo
paradigma”.
7
Véase Wagner, Terremoto en la Iglesia: 128-30.
8
Ibid, 131.
9
Ibid, 145-47.
Formas de gobierno de la “iglesia” 8
Durante los primeros cuatro siglos, la iglesia cristiana no contó con edificios para
reunirse. Los únicos lugares donde se congregaban eran en casas. Cuando la persecución
se incrementaba, los grupos pequeños de creyentes se reunían a escondidas en cualquier
sitio posible. Esta estructura permitió que el cristianismo se regara como pólvora y que la
fe, llevada a la práctica y transmitida por todos los cristianos fuera expandida con
velocidad incendiaria.
Durante la historia de la iglesia, los movimientos que organizaban a los laicos en grupos
pequeños se multiplicaban rápidamente. Tal vez los mejores ejemplos en este sentido
fueron las órdenes monásticas, y el movimiento anabautista, el pietista, el moravo y
sobre todo el movimiento metodista.10 Pero el movimiento celular tal como hoy se
conoce y practica, a pesar de lo que muchos dicen, tiene su origen en Seúl, Corea del
Sur, en el seno de la iglesia del pastor Yonggi Cho a principios de la década de los
sesenta.
Como se puede apreciar, esta estructura permite la fluidez en todo nivel en tres vías: la
de comunicación, la de transferencia de autoridad, y la de rendición de cuentas con base
en la responsabilidad delegada. Otra ventaja de esta estructura es que permite que cada
persona comprenda la organización de la iglesia, y sepa que puede ascender al nivel
inmediato superior de acuerdo con su compromiso, el desarrollo de sus capacidades, y la
disponibilidad de tiempo. El espacio para ascender y ministrar nunca está cerrado. Por
el contrario, casi siempre está abierto y en espera de más líderes dispuestos a ascender.
1.2.2. Evidencias en contra: Aunque los puntos a favor son varios, siempre se sigue
manteniendo una estructura jerárquica donde una persona es el gobernante máximo de
toda esta organización. En este caso, el pastor general o en su defecto el apóstol es
quien gobierna por encima de todos los demás. En este sentido, comenzando desde
arriba el gobierno siempre es descendente.
Las iglesias “fuertes” se caracterizan por altos grados de compromiso, disciplina y celo
misionero. Hay un fuerte liderazgo que hace altas demandas de sus miembros. El líder
10
Para conocer más detalles de la manera en que estos movimientos y muchos otros a lo largo de la historia
de la iglesia organizaron su avance por medio de grupos pequeños, Joel Comiskey ha escrito todo un largo capítulo
dentro de su disertación doctoral titulado “History of the Cell Movement” que se puede consultar por Internet en
http://members.tripod.com/celycecomiskey/small_group_research.htm. Además, vea de William A. Beckham el
capítulo 11 de su libro, A Second Reformation (1995): 115-21.
Formas de gobierno de la “iglesia” 9
La rendición de cuentas por parte del pastor principal o apóstol no es del todo clara.13 A
simple vista parece que no cuenta con ningún tipo de organismo humano a quien rendir
cuentas. Debido a su posición encumbrada en la estructura organizacional sólo le
corresponde rendir cuentas ante Dios. Lo cual parece ser una atribución especial que le
confiere la misma estructura jerárquica del gobierno teocrático.
11
Véase Wagner, Terremoto en la iglesia: 99-102.
12
Ibid., 101.
13
En su libro, Peter Wagner reconoce que este asunto de la rendición de cuentas por parte del apóstol es
espinoso. Pero algo queda claro, los líderes apostólicos no deben rendir cuentas a la congregación, tampoco a un
grupo de ancianos. Las únicas personas que podrían servir como regentes de un apóstol sería otro apóstol, ya que:
“las ovejas no disciplinan al pastor, los pastores disciplinan a los pastores”. Ibid: 102-105.
14
Para el presente estudio se seguirá el trabajo realizado por In Sink Hong, ¿Una Iglesia Posmoderna?
(Buenos Aires: Ediciones Kairós, 2001). Esta obra fue el resumen del estudio de campo y tesis que presentara para
optar al doctorado en el Instituto Superior Evangélico de Estudios Teológicos (ISEDET).
15
La Iglesia Evangélica Bautista del Centro (IEBC) de Buenos Aires fue fundada en 1883 por el pastor suizo
Pablo Besson.
Formas de gobierno de la “iglesia” 10
2.2.3. El equipo de diáconos: está formado por hombres y mujeres llamados por Dios
Formas de gobierno de la “iglesia” 11
para una tarea de servicio pastoral orientada hacia el cuidado de la grey. Son los ayudantes
inmediatos de los pastores. Se ocupan especialmente del avance y estado espiritual de la
iglesia, del cuidado pastoral de los miembros, de la visitación pastoral regular, de la
preparación y distribución de la Cena del Señor en los cultos respectivos y a los miembros
impedidos de concurrir, de la revisión y actualización de la lista de miembros, de los
arreglos y decisiones referidas a las relaciones laborales del personal de la iglesia, de las
cuestiones disciplinarias en conjunto con el equipo pastoral, de la asistencia a los pastores en
casos de bautismos, sepelios, consejería pastoral y visitación, y de la evaluación y
recomendación de candidatos al bautismo y a la feligresía de la iglesia.
Las razones para una reforma a la estructura anteriormente planteada son: (1) una gran
expansión del número de miembros y de la dimensión física; (2) un cambio ideológico en
Deiros.
3.1.1. El área pastoral asistida por dos secretarías: estas dos secretarías son, la
secretaría de la iglesia y la de planeamiento. Este equipo pastoral ocupa el lugar más alto del
organigrama. Bajo la supervisión del equipo pastoral, la iglesia se divide en dos áreas: el
área ministerial y el área apostólica.17
16
Documento interno Nº 28, “Una iglesia que crece”, sección “Estructura organizativa y operativa” (1991): 7;
citado en ibid., 54-55.
17
La expresión apostólica no aparecía en el organigrama de 1990. Es un nuevo concepto que fue adquiriendo
la iglesia a través del desempeño de los dos pastores principales.
Formas de gobierno de la “iglesia” 12
3.1.3. El área apostólica se divide en dos, el equipo presbiterial y las iglesias locales:
Deiros entiende la labor apostólica como una especia de obispado, pero no en referencia
directa a una estructura jerárquica institucionalizada en la iglesia, sino como un concepto
funcional para levantar iglesias y, según su palabra, pastorear a los pastores. Por otro lado,
la IEBC se congrega en diferentes lugares como congregaciones locales. Es decir que es una
sola iglesia constituida por varias congregaciones, en diferentes lugares, y que reconocen
una misma visión, fe, práctica, misión y ministerio. Cada congregación local es autónoma
pero interdependiente con las demás como miembro de la IEBC. El equipo presbiterial está
compuesto por doce lugares de reunión: Villa Devoto, Berazategui, José León Suárez, Río
Gallegos, San Juan, Villa Borrego, Avellaneda, Caleta Olivia, Viedma y Leandro N. Alem.
Es curioso notar que aún esta estructura actual no es permanente sino temporaria, y debe
ser sometida a evaluación en cada nueva coyuntura de la vida de la iglesia. Siempre hay una
modificación estructural u cada nueva estructura debe ser evaluada a la luz del Nuevo
Testamento y conforme a su efectividad para el cumplimiento de la misión. Esta posibilidad
permanente de cambio estructural muestra su fuerte pragmatismo en el manejo de la labor
misionera, y hace perfilar la efectividad como un elemento fundamental para la evaluación
de la misión de la iglesia. Muy aparte de sus cambios estructurales, mediante un Documento
Interno de la iglesia afirma:
La IEBC—por razones de herencia histórica—se reconoce parte de la tradición bautista y, como tal,
coopera con la Alianza Mundial Bautista, la Convención Evangélica Bautista de la Capital Federal y
otras varias entidades fraternales y de cooperación bautistas.18
18
Documento interno, “Estructura misionera de la iglesia”: 2; citado en ibid., 60.
Formas de gobierno de la “iglesia” 13
2 Ti. 2:2).
3.2. Organizarse para satisfacer necesidades: La Iglesia del NT, no solamente organizó
por organizar. Más bien se organizó para satisfacer las necesidades que se presentaban (ej.:
Hch. 6).
Por otra parte, toda organización debe ser funcional, ha de ser tan simple como sea posible.
Las pautas organizativas complicadas frecuentemente se constituyen en un fin en sí mismas.
Una buena forma de probar su la simplicidad se ha perdido o no, es examinar si la estructura
está sirviendo para alcanzar los objetivos bíblicos.
19
Francis Schaeffer, La Iglesia al final del Siglo XX: 92.
Formas de gobierno de la “iglesia” 14
Fuentes consultadas
Gómez Panete, José Luís. “El Gobierno de la Iglesia: modelos de gobierno y la Escritura”.
Alétheia 14, 2/1998. (págs. 29-47)
Hayes, Ed. La Iglesia, el cuerpo de Cristo hoy. Puebla: Ediciones las Américas, 2003. (págs.
153-157)
In Sik, Hong. ¿Una Iglesia Posmoderna? En busca de un modelo de iglesia y misión en la era
posmoderna. Buenos Aires: Ediciones Kairós, 2001. (46-60)
Yoccou, Raúl Caballero. Eclesiología: estudio de la Iglesia del Nuevo Testamento. Tomo I.
Buenos Aires: Ediciones Mentor, 1971. (págs. 135-154)